Campeonato polémico.
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Tras dos jornadas de infarto, en las que Hevia y Sordo pelearon a la décima la victoria en el Rallye Prínicipe de Asturias, un incidente con unas piedras en el antepenúltimo tramo empañaron un fin de fiesta que se presentaba apoteósico.
Antes de disputar el duodécimo tramo, Sordo ganaba a Hevia por 2,7 segundos, el asturiano llegaba a meta y tras él lo hacía el cántabro cediendo algo más de 2 segundos, pero declaraba que se había encontrado unas piedras en medio del tramo. Inicialmente se especuló con la posibilidad de un sabotaje, aunque desde la organización se confirmó que no era el caso y se debía a un hecho fortuito. La incertidumbre se apoderó del parque de trabajo, ya que se hablaba de anular el tramo e incluso Citroen insinuó la posibilidad de que Sordo abandonase la prueba. Todo quedaba pendiente de la resolución del Colegio de Comisarios Deportivos. La prueba continuaba su curso pendiente de esa resolución. Sordo ganaba por nueve décimas de segundo en el penúltimo tramo, mientras que Hevia ganaba el último por 2,3 de ventaja sobre Sordo. Con los tiempos asignados y a falta de la decisión de los Comisarios el rallye era para Hevia por unas escasas 8 décimas de segundo.
Los Deportivos decidieron neutralizar el tramo y dar el tiempo de Hevia a todos los participantes. En Renault aceptaron la decisión y el rallye junto con el Campeonato de España 2005 fue a parar a manos de Sordo.
La decisión no dejó de causar revuelo y polémica en el parque de trabajo sobre todo por que en la primera jornada de la prueba la aparición de una mancha de aceite en un tramo no supuso la misma reacción por parte del organizador. Es una pena que el campeonato de Sordo se vea empañado por la polémica, ya que al igual que Hevia ambos pilotos han luchado hasta el final por un Campeonato que se merecian cualquiera de los dos.
El rallye, valedero para la Copa de Europa, presentaba un formato dividido en dos etapas a celebrar el Sábado y Domingo. Sordo y Hevia se jugaban el campeonato en la prueba ya que al asturiano sólo le valía la victoria para defender su opción en la última prueba mientras que una victoria en Asturias supondría el título para Sordo. Las espadas estaban en alto y ambos salían a por todas.
Hevia se hacía con el primer bucle, aunque Sordo no bajaba el ritmo y se colocaba 5,3 segundos por detrás. Ambos pilotos marcaban un ritmo endiablado y tramo a tramo se iban distanciando del resto. En la lucha por la tercera plaza encontrábamso a Fuster, seguido de Ojeda y Fombona. Tras ellos se formó otro grupo que comandaba Armide Martin, seguido de Vallejo que se encontraba con un motor que no rendía al 100% y Martínez Conde. Todos ellos se encontraban a más de un minuto de la cabeza. En el Grupo N, Conde lideraba, seguido de Gutiérrez y Colldecarrera, éste último más pendiente de sumar puntos para asegurar el Campeonato que de ganar la prueba.
En la repetición de los tres tramos de la mañana empezó ganado Sordo, aunque Hevia le devolvió la pelota en el siguiente, para ver como Sordo le superaba en el último del bucle. Hevia seguía liderando el rally pero Sordo logró reducir la distancia a unas escasas 5 décimas. Ojeda superaba a Fuster en la tercera plaza, mientras que Fombona se descolgaba a 26 segundos del alicantino. Vallejo seguía en tierra de nadie justo por delante de Conde que continuó mandando en la categoría de Producción, tras él, Colldecarrera superaba a su compañero Gutiérrez.
A falta de dos tramos para finalizar la primera etapa, la emoción estaba servida, quedaba por ver si Hevia era capaz de neutralizar la remontada de Sordo, cosa que consiguió en el penúltimo tramo, ya que ganó de 1,5 segundos. El mismo tramo en el que Ojeda se salió, viéndose obligado al abandono. En el Gr.N, Conde siguió marcando su ritmo, seguido de Gutiérrez quien lograba superar a su compañero de equipo Colldecarrera.
El exceso de público obligó a la organización a anular el último tramo del día, por lo que tras casi 140 km. de tramos cronometrados, la diferencia entre ambos pilotos era de 2 segundos. Se adivinaba un final de rallye de auténtico infarto.
El Domingo los tramos amanecieron secos y abarrotados de público dispuesto a ver cómo se reolvía la pelea épica que estaban librando Hevia y Sordo.
El cántabro atacó a fondo ya en el primer tramo de la jornada, neutralizando la ventaja de Hevia, llegando a estar 2,7 segundos delante antes de disputar el tramo del incidente con la piedra. Lo sucedido a partir de ese tramo es conocido y el resultado final fue la victoria Sordo, un resultado un tanto desvirtuado por el incidente, pero merecido sin duda por la excelente temporada disputada por el oficial de Citroen.
Tras Hevia se clasificó Fuster, seguido de Fombona que pudo llegar al final a pesar de sus problemas con el embrague, quedando 1 segundo por delante de un Vallejo que disputó un rally para olvidar.
En el Grupo N victoria incontestable de Martínez Conde, mientras que Colldecarrera tuvo que decir adiós a sus aspiraciones a zanjar el título en Asturias ya que llegaba a final del tramo 11 con las dos ruedas delanteras pinchadas, situación que lo llevó al abandono. De esta forma Gutiérrez se hizo con el segundo puesto mientras que Garrido heredada la tercera plaza del podium.
El Trofeo C2 una vez más, comenzó liderando Monarri, aunque un pequeño golpe con pinchazo incluido en el tramo 10, le costó la victoria. De ello se beneficiaron Rico y Márquez aunque no pudieron contener la remontada de Balasch, que tramo a tramo se hizo con la victoria final, viéndose favorecido por la neutralización del tramo del inicidente. Tras el catalán se situó Rico, seguido de Márquez, Izaguirre y Muñiz.
El Príncipe de Asturias tambien fue puntuable para el Desafío Peugeot, en él, el piloto local Vallín dio todo un recital de pilotaje, dominando con rotundidad desde el primer tramo. Tras Vallin se clasificaron Arias y Mascaró.